fbpx

Trucos de belleza en invierno

En invierno no se pueden descuidar los cuidados básicos para el cuerpo, rostro y pelo. Por ello, nosotros te queremos dar unos trucos útiles que te ayudarán a mantener tu belleza en invierno.

Trucos de belleza en invierno

Lo más importante es saber que las necesidades no son las mismas en verano como en invierno. Por ello, los productos de belleza que se vayan a utilizar tendrán que acoplarse a las necesidades de la temporada en la que estemos. Además, es muy importante, que cuenten con el mayor número de ingredientes naturales posibles, ya que, estos no sólo protegen, sino que, además, regeneran las defensas naturales.

Para que conozcas los requisitos básicos que tienes que cumplir para estar bien cuidada y presentar ese aspecto sano que tanto nos gusta, deberás cumplir una serie de pautas básicas que a continuación desgranamos para mantener tu belleza en invierno:

Mantenerse hidratado

La hidratación es clave para cualquier época del año, pero, sobre todo en invierno, cuando la piel sufre agresiones dobles.

Las primeras, climatológicas, por los agentes externos y extremos que se dan en las épocas más frías. El viento y el frío son dos enemigos de la piel. Los efectos que producen son que se cuartea y pierde hidratación si no se le presta atención.

La segunda agresión viene por las calefacciones y sistemas para crear y mantener el calor dentro de los recintos. El cambio radical de temperatura y la sequedad que se crea artificialmente dentro de los edificios pasa factura a la piel. Esta se reseca y aparecen las tan temidas y molestas rojeces. Por ello, es clave el utilizar productos que hidratan la piel, sobre todo de la cara, manos labios y el cabello, que son las partes más expuestas, mientras ayudan a su barrera protectora propia. Pero, también se tiene que seguir un plan de hidratación profunda, que pasa por tomar, al menos 1,5 litros de agua al día.

Comprueba si estás correctamente hidratado en este enlace.

Pasar del agua caliente

Tal vez este es el punto más difícil que se puede dar. No hay nada que dé más gusto que, después de un largo día de trabajo, un chorro caliente de agua, que relaje y transporte a un lugar mucho más cálido y soleado. Pero este es un error que casi todos cometemos. Ya que, el agua caliente, al salir de la ducha nos hace notar más el frío del ambiente. Por lo que hay que intentar no poner el termostato al máximo.
Otra de las claves es no tomar más de una ducha diaria. Aunque en verano por el sudor, cada vez que se realiza un ejercicio sólo dan ganas de entrar en la ducha. Esto, en invierno, además de no pasar, no es sano, porque la piel, pierde hidratación.

Tomar frutas y verduras frescas

Con la bajada de las temperaturas, apetece comida más pesada, que ayuda a entrar antes en calor. Pero, esto no es lo más apropiado, ya que el organismo sigue necesitando el mismo aporte de vitaminas.

Hacer ejercicio

A pesar del frío y las pocas ganas que hay al reducirse las horas de sol, es muy importante seguir con las rutinas deportivas pautadas. Ya que el cuerpo necesita quemar el extra que se le da por el cambio de alimentación, además de reducir los niveles de estrés.

Dormir al menos 8 horas

Dormir al menos 8 horas es una clave para todo el año. Ya que mantiene la mente descansada y permite que el cuerpo rinda al máximo. Pero sobre todo, cuando hay menos luz, y necesitamos un aporte de energía extra para llegar a final del día.



Abrir chat
Bienvenido. ¿En qué podemos ayudarte?
Visit Us On FacebookVisit Us On InstagramVisit Us On Youtube